Durante cinco décadas ha sido un árbol que has cobijado a noveles talentos

CARMEN LUZ BEATO

SANTO DOMINGO,D.N.- pasado cinco décadas, desde que el sueño de Freddy Ginebra y un grupo de sus amigos, de crear un espacio donde el arte y la cultura pudiera tener una mayor difusión sin los límites y la represión que significaba la época de los años 70, donde la música, la pintura, la literatura, la fotografía, y el teatro, representaban un grito de esperanza y de libertad.

Así nace en el mes de julio 1974, Casa De Teatro, como un centro cultural situado en la ciudad colonial de Santo Domingo, inaugurado unos meses antes del Festival Internacional de la Canción “7 días con el pueblo” que reunió a intérpretes de la nueva canción de diferentes partes del mundo, y que varios de ellos tuvieron conciertos en ese escenario.

Allí han nacido muchos nuevos artistas nacionales. Sueño y proyecto se unificaron y todos los esfuerzos se conjugaron para que este viejo espacio se convirtiera en un centro de cultura donde los artistas nuevos y los consagrados encontraran su nido. Cantantes, músicos, bailarines, poetas, narradores, actores, pintores, diseñadores, fotógrafos… hicieron de la vieja casa colonial su hogar.

El impacto fue tal, que un espacio concebido solo para teatro se transformara en galería pictórica, sala de ensayos, escuela para niños y adultos, formación de grupos de teatro, escuela de danza, grupos de fotografía, noche de jazz, teatro de títeres, reuniones de poetas, centro de conferencistas… la casa cobró vida y se convirtió en un maravilloso canal  de expresión para la manifestación del talento sin la necesidad de disponer de grandes recursos económicos prestigios, simplemente expresar el talento.

Hoy, 50 años después, Casa de Teatro sigue siendo el lugar que reúne a una gran familia, que por cinco décadas han estado allí militantemente, dejando como herencia a sus hijos y nietos, el cariño creado con su fundador el gran duende de lindos ojos verdes: Freddy Ginebra, un gran soñador, promotor y defensor de “La cultura que somos todos”.

Cada año en su galería se realizan más de 30 exposiciones de pintura y fotografía, se producen espectáculos de música, ballet, teatro, conferencias y otras tantas expresiones culturales. Y su bar es un centro para reunir artistas y amigos, para disfrutar de buenas músicas y compartir de los recuerdos acompañado de un buen vino.

Habla Freddy Ginebra

“Son muchos los nombres que han iniciado su carrera artística en este lugar. Son muchos los jóvenes que han decidido sus vidas al confrontar sus trabajos con el público. Son muchos los hombres y mujeres que no han perdido la esperanza de soñar y de alguna manera a través de los años, la casa ha mantenido la poesía, la capacidad de asombro y la fe en un ser humano capaz de no traicionarse y perder su sensibilidad, y la posibilidad de descubrir a nuestro Dios en la búsqueda incesante de la belleza y la creación” afirma Freddy Ginebra.

Para el gestor cultural haber estado en Casa de Teatro con las puertas abiertas ha sido suficiente “Estos 50 años de Casa de Teatro han sido 50 años de aprendizaje, de haberme sentido útil, de haber aprendido a soñar con otros. Han sido 50 años donde a través de los demás, yo he podido descubrir y tocar posiblemente a Dios”.

Ginebra precisó que “Cuando uno descubre un artista y le abre la posibilidad de que él transmita todo lo que tiene dentro y lo comunique a tantos seres humanos que necesitan de su luz, para mí, yo no creo que haya hecho muchas cosas, simplemente he estado ahí con las puertas abiertas y eso ha sido suficiente”.

“Todo aquel que no tiene apellido, que no tiene dinero ha podido entrar sin ningún tipo de problema a Casa de Teatro, y yo lo he ayudado con el mismo amor y el mismo interés, con el que he ayudado a otros de la casa. Yo pienso que si se abrieran muchas casas de teatro en nuestro país habría menos delincuentes, menos drogadictos, menos jóvenes suicidas y mucha gente dispuesta a hacer que este país siga siendo el mejor”, aseguró Freddy Ginebra.